jueves, 13 de diciembre de 2007

EL FOTÓGRAFO


En Sevilla se da una rara avis dentro de la fotografía a la que gracias a Dios pertenezco; a parte de trabajar o no dentro de otros campos de la fotografía, nos dedicamos a nuestra ciudad y sus tradiciones, porque nos gusta, disfrutamos fotografiando temas que después llegan a boletines, libros, revistas,..., y aunque muchas veces molestemos llegamos a ser necesarios, no somos el ombligo del mundo pero a cualquiera le gusta ver una foto cuando abre el boletín de su hermandad, y las hermandades no pagan y los fotógrafos profesionales si cobran, con lo que hay algo que falla en esa ecuación, llevo a gala ser amigo del que sale en la foto se llama Rafael y pronto será padre de una hermosa niña, que por el bien de la madre esperemos que no saque algunas aficiones del padre.

2 comentarios:

cerreño de san esteban dijo...

Que buena foto chulo. Pero cómo se te ocurren esas cosas tío?, eso de fotografiar a otro mientras..... Supongo que es como si te miraras a un espejo. Hay que tener imaginación para que se le ocurran a uno esos detalles. Para mí sería imposible. Yo me limitaría a retratar la cara del cristo y poco más.

Anónimo dijo...

Me he quedado "maravillá" al ver la sombra proyectada en el muro...
Felicidades a los nuevos padres.

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