jueves, 26 de diciembre de 2013

GORDI

Como diria Cicerón."La vida de los muertos perdura en la memoria de los vivos". Y allí estaban todos en el bar Taquilla, el Lunares,el Paco, el Lobo,...,porque aquí le ponemos el artículo delante del nombre cuando se convierten en nuestros amigos. Bebían cerveza por ti, en tu recuerdo. Venían de rezarle a la Niña de los ojos hermosos de la calle Larga de Triana. Guiados por un cura llegado del polígono, del barrio del que salió el vendaval del número tres. Aquel al que llaman Gordillo, parecido a tu nombre y de los mismos colores. Tenían la alegría de tu recuerdo, aunque los ojos denotaban la tristeza del amigo que se fue de la manera más inesperada. En esa avenida que tantas veces cruzaste para ver a tu Betis. Allí los dejé brindando por ti. Con el tiempo te recordaran(te recordaremos), con la media sonrisa, esa que se esboza cuando se recuerda a alguien querido. Descansa en paz.

martes, 24 de diciembre de 2013

LUIS

De repente cuando aun las tinieblas poblaban la tierra. Su madre se puso de parto.Aún las Estrellas que tanto significan para su padre y su tio seguían en el cielo y su madre notó que Luis venía. A una familia trianera por todos sus vertices desde la calle Larga a Castilla. Desde la Estrella al Cachorro pasando por el Arenal. Nacido de ese amigo que tan poco hace que conoces y tanto ha conseguido meterse en tu sangre y su amor hecha mujer.En una clinica que lleva el corazón en su nombre, ese corazón que tanto se nota en su madre. Reyes y Antonio han sido padres y su tio postizo desde estas líneas no puede hacer otra cosa que emocionarse.

domingo, 8 de diciembre de 2013

EL DÍA DE LA PURA

Hoy la noche entró en orujo y las palabras quedaron embriagadas de un día largo. Mañana saldremos a fotografiar a la Virgen María.

martes, 3 de diciembre de 2013

LA CARA DE LA ESPERANZA

Sonaba helada la mañana en la Resolana, incluyendo ese atrio que cuando el viento sopla se convierte en el centro del tiritar. Iba con el alma inquieta por ver a la Esperanza. La que se hizo un gran hueco en mi corazón de calle Adriano que siempre viró hacia la calle Larga. Iba a verla a Ella porque quería verla de Inmaculada. Mientras desayunábamos en unos de esos bares del Arco pallá, que no pasará a la historia por su manteca colorá, repasé las redes sociales a mitad incendiadas, a mitad emocionadas por la nueva indumentaria de la Virgen. Entré en la Basilica mientras resonaba en mi cabeza aquella sevillana "..con corona o con sombrero, pa mi eres siempre la misma...". Y allí seguía estando Ella con su entrecejo fruncido, con su doble perfil que sonrie y llora, con la ristras de peticiones de personas que la rodeaban, con abuelitas que le pedían y agradecían a partes iguales. La miré y la remiré por identificar la desfachatez de los priostes que algunos gritaban a viva voz en las redes sociales, pero sólo la ví a Ella. Su rostro que todo lo llena. Cuando salimos andando hacia el Pumarejo, con el sol empezando a calentar, me di cuenta de que no me había fijado en el color de su saya. No había podido dejar de mirar su cara. La cara de la Esperanza de los mortales, que da igual de que color vista, siempre que esté presente.

LA ÚLTIMA PRINGÁ

 Extraña sensación la de decir que tienes que ir a un bar a comerte un montaito antes de que cierre el domingo y que el camarero descendient...