sábado, 26 de julio de 2008

MI ABUELA


Sonaba la nana a la Señá Santa Ana, mientras las luminarias encendían el inicio de tu santo.
Allí a pie de tu campanario nos quedamos a la sombra de recuerdos. La abuela del Señor celebraba su día y mi abuela, aquella trianera del Corral del Moro recibió el mismo nombre que el de la Madre de la Virgen.
Bajamos de la torre con el cansancio propio de los días señalaitos y nos fuimos a seguir recordando la fiesta que nació cuando se velaba a la Abuela de Jesús.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Mas sencillez, sonoridad y belleza no cabe en un nombre.

Felicidades a todas las que lo llevan , lo llevaron o lo llevarán.

LA ÚLTIMA PRINGÁ

 Extraña sensación la de decir que tienes que ir a un bar a comerte un montaito antes de que cierre el domingo y que el camarero descendient...