Soñaban estrellas las torres. Y rebuscaba la luna espadañas donde mirarse. Poco a poco el día se ocultaba sin percibirlo. Despacio, muy despacio. Las miradas iban buscando el refugio de las casas y el descanso ya ganado a esa hora. Allí permanecí mirando las sombras posarse en la tierra. Allí aparecieron los demonios en esa hora en la que vuelven para atormentarnos.
martes, 11 de noviembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
A LA SOMBRA DE ROCÍO Ya ha llegado la Virgen de nuevo a su casa. Ya hemos vuelto de verla en la calle, este año que hemos podido allí hemos ...
-
Recuerdo de pequeño usar la palabra rancio, para aquellos alimentos que se habían echado a perder o que estaban a punto de hacerlo. ...
-
Gata te dedico un día de lluvia. Como el de ayer al que salí sin reloj y por supuesto sin paraguas . Un día que olía a tierra mojada y a r...
-
A LA SOMBRA DE ROCÍO Ya ha llegado la Virgen de nuevo a su casa. Ya hemos vuelto de verla en la calle, este año que hemos podido allí hemos ...
5 comentarios:
Preciosa, la breve descripción del momento. Saludos
Tan breves y benefactoras para mi salud son tus entradas, que ya empiezan a ser como una medicación cada mañana.
Una vez más: enhorabuena.
Un abrazo.
Tu cámara es capaz de captar aquellos sentimientos que el cielo de Sevilla tiene evaporados...
Impresionante.
Un abrazo amigo.
Preciosa la imagen y el texto que la acompaña.
Tú post, simplemente, mágico.
Un beso.
Publicar un comentario