Veía tu rostro hasta cuando cerraba los ojos. Tu rostro suplicante. Esa mirada dolorosa que pedía que ese cáliz pasara de ti cuanto antes.Mirabas al cielo buscando tu tabla de salvación. En un instante tu mirada se cruzo con la mía y un escalofrío sacudió mi espina dorsal.
domingo, 19 de octubre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
LA ÚLTIMA PRINGÁ
Extraña sensación la de decir que tienes que ir a un bar a comerte un montaito antes de que cierre el domingo y que el camarero descendient...
-
Extraña sensación la de decir que tienes que ir a un bar a comerte un montaito antes de que cierre el domingo y que el camarero descendient...
-
...que fébril la mirada, que diría el tango. Me paro a pensar que si esto que si aquello, que si para acá que si para allá. Y la fébril...
-
Pudiera llamarse Isabel. Pudiera ser que ha sido madre de su segundo y tercer hijo, los hermanos mellizos que convertirán su familia en ci...
No hay comentarios:
Publicar un comentario