A Lola, tu eres mi primavera.
Volvió a mirar afuera. Ya había florecido el naranjo. Había nubes y un poco de calor. Quizás caería alguna tormenta esa tarde. Dentro olía a frito y a miel. Alguien hacía torrijas. Algunas túnicas se veían tendidas en las azoteas. Pronto nacía la primavera. Los recuerdos y los sueños se aglomeraban en su mente en esos días en los que se despiertan los sentidos.
3 comentarios:
Ojú Canónigo de miarma, cuando he visto la foto y leido el texto se me ha venido a la mente la imagen de mi patio de vecinos.
Siempre, en estas fechas, había alguna túnica tendida en la azotea y casi siempre olía a miel y aceite de las torrijas y pestiños.
Me has alegrado el día.
Un abrazo.
Disfrútala esta y todas la s primaveras
BEsos
Preciosa la foto. Ya falta poquito para que Sevilla se vista de gala. Un abrazo para ti y saludos pa la familia.
Publicar un comentario