viernes, 11 de enero de 2008

MALENA IV


Es como una tarde de invierno en la que el sol desdobla abrigos y acortaba el fin de semana por segundos; tenía esa mirada profunda de contar sin usar palabras, poco a poco se fue haciendo un hueco en mi corazón y hasta llegar aquí, muchos ratos hemos hablado de todo, hablar, en momentos en los que se necesita y en momentos que sólo es un entretenimiento, llegar abrir el canal y ver su muñeco verde encendido es un alivio, el de saber que el ratito de felicidad de cada día está empezando. Gracias Su.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Sí Canónigo, hemos hablado mucho y casi de todo, pero también hemos tenido ratos de silencio y son en esos momentos en los que sabes que estás frente a un amigo de verdad. Silencios compartidos y miradas sin palabras. Tu si sabes cual es el lenguaje de mis ojos,¿verdad?

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