martes, 12 de febrero de 2008

A GUSTO


Debo reconocer ante todo que el título de esta entrada siempre me trajo por la calle de la amargura ortográfica, por aquella aversión que le tengo yo a la soledad y que me llevaba a unir las dos palabras del título.
Y por qué de ese título y esta foto, pues porque ahora me siento bien, saboreo los momentos como si fueran los últimos, todos, los que os puedo contar y los que no, de entre los primeros ver a dos de mis titulares una soleada mañana de primavera, o cenar en casa de Sandra y J.I., sintíendome como si estuviera en mi casa, no os lo vais a creer pero eché una cabezada de 5 minutos o así y creo que soñé; de los que no os puedo contar,....,pues nada que como decía la sevillana, cansao pero contento, mañana desayuno en el taquilla gran tostada con zurrapa de higado, el cum laude de los desayunos,(vente un diita Su, no tiene porque ser martes, ahora menos viernes y lunes, valen todos, lastima que una que yo me se tenga que trabajar), a veces pienso que menos que nací aqui, si llego a nacer en El Cairo,...., bueno al Rocío de camino son 100 días, pero lo chungo es el Nilo, en el Quema no hay cocodrilos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Te confieso una cosa...
Veia tu cofradía como la niña ilusionada del barrio. Me encantaba.
Cuando me marché solo me daba tiempo a llegar el Viernes Santo al mediodia con el tiempo justo, a veces ni siquiera eso.
Pero, el domingo antes de volverme a marchar, me paraba justo ahi , donde has tirado la foto y la veía salir solo para mi.

Desde que volví sigo haciendo lo mismo, no la veo cuando sale, sino cuando lo hace solo para mi.

LA ÚLTIMA PRINGÁ

 Extraña sensación la de decir que tienes que ir a un bar a comerte un montaito antes de que cierre el domingo y que el camarero descendient...