Noches eternas pensando en tu mirada. Noches recordando nazarenos. Noches para no olvidar aquel atardecer. Noches para releer aquellos versos de Diego. Noches para recordar las copas llenas de humo y madrugada. Noche para seguir sintiendo tu sonrisa. Noche de raso y de luz. Noches llenas de recuerdos y de sueños.
4 comentarios:
q ganas d q huela ya a zahar y a incienso por las callejuelas...
Noches para resoñar un sueño:
Me llenaste de Carey
el Viernes siempre soñado,
con tus andares de ley
y tu figura de Rey
de hermoso lirio tronchado.
Regaste de Divinidad
a la soleada tarde,
e inundaste de bondad
y sumisa majestad
a la noche de azahares.
De lirios se convertía
el camino que pisabas,
y el aire se retorcía
con las dulces melodías
de cornetas afinadas.
El cielo azul te ponía
el fondo más deseado,
recortando de poesías
a la dulce travesía
de tu caminar doblado.
Mis retinas se llenaron
de Viernes camaronero,
siguiendo el paso cansado,
firme, largo y asentado
del mejor de los trianeros.
Te debo ¿uno?... no; te debo varios coroneles.
Un abrazo.
Perdimos un bloguero, pero ganamos un comentarista más grande aún de lo que ya lo teníamos; que maravilla que se deje caer con estas cosas… Y que grande tú recordando.
Kisses
Noches de Viernes Santo que parecen no querer acabarse nunca...
Un saludaso.
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