jueves, 15 de abril de 2010

AUSENCIAS


Se perdieron los colores. Desaparecieron las luces. Se transformaron los días y se perdieron las horas. Y allí seguías salvando el mundo con el amor que se prendía de tus llagas. Amaneció y todo volvió a su sitio. A veces los sueños desaparecen con la luz del día.

4 comentarios:

Julio Mod. dijo...

"No me mueve mi Dios, para quererte
el cielo que me tienes prometido
ni me mueve el infierno tan temido
para dejar, por eso, de ofenderte.

Tú me mueves, Señor, muéveme el verte
clavado en una cruz y escarnecido,
muéveme ver tu cuerpo tan herido,
muévenme tus afrentas y tu muerte

Muéveme, en fin, tu amor de tal manera
que aunque no hubiera cielo yo te amara
y aunque no hubiera infierno te temiera

no me tienes que dar porque te quiera,
porque aunque lo que espero no esperara
lo mismo que te quiero te quisiera."
Anónimo del siglo de oro español.

Antonio, hoy particularmente, gracias por esta entrada.

Diego Romero dijo...

A ver cuando me das un curso de afotos, pare, aunque sea en el Rinconcillo y luego no me acuerde de ná.

No cogé ventaja, ¡miarma! dijo...

Buen acompañamiento para esa foto la del amigo Sibelius.
Diego, cada vez estoy más convencido de que este tío no es un artista de la fotografía sino del fotochó.
¡Que habilidad, miarma!
Un abrazo para los tres.

pepe leon dijo...

Gracias!!! tres veces agradecido, es sentimiento ante la asencia de lo humano y lo divino y que aveces no sabemos apreciar

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